Características más importantes del planeta Neptuno


La gravedad en la superficie de Neptuno es casi igual a la Tierra


 A primera vista, parecería que Neptuno sea un planeta más bien "aburrido". Desde luego su lejanía de la tierra no lo sitúa entre los favoritos para ser explorados. También su "parecido" con Urano: composición y dimensiones son similares.

Sin embargo si algo me ha quedado claro en este primer periplo por nuestro vecindario solar, es que cada cuerpo, cada objeto que puebla el variopinto zoológico celestial cuenta con unas particularidades y unas características distintivas de los demás.

La órbita de Neptuno, por ejemplo, es todavía más circular que la de Urano. (e= 0,009 frente a e= 0,047 de Urano)

Neptuno tarda 164 años y 316 días en dar la vuelta al sol, mientras que Urano la hace en 84 años

La masa de Neptuno es de 17,2 veces la de la tierra mientras que la de Urano es de 14,53

Y así podríamos hacer más y mas comparaciones...

En Neptuno encontramos los vientos más rápidos del sistema solar, con una atmósfera mucho más violenta de lo que se creía posible. Asimismo, al igual que en Júpiter, en Neptuno se obervan varias manchas: la Gran Mancha Oscura y la Pequeña Mancha Oscura, así como una dinámica formación nubosa conocida como "El scooter".

Neptuno cuenta con un sistema de anillos planetarios muy tenues y débiles compuestos principalmente de polvo. El material de los anillos es uy oscuro y es probable que esto se deba a la presencia de compuestos orgánicos producidos por la radiación de la magnetosfera del planeta.

El sistema consta de 5 anillos a los que se les ha puesto el nombre de los astrónomos más relevantes en la investigación del planeta. Del más exterior al más interior, los nombres son: Galle, Le Verrier, Lasell, Arago y Adams.

Un anillo coincide con la órbita del satélite Galatea y luego hay tres satélites más (Náyade, Talasa y Despina) que orbitan entre los anillos, haciendo de lunas pastoras.

El campo magnético de Neptuno resulta, asimismo, muy peculiar: está inclinado 47 grados con respecto al eje de rotación y su origen (a diferencia del de la tierra) no está en el centro del planeta.

La estructura interna de Neptuno revela que no existen discontinuidades significativas entre las distintas regiones: atmósfera, manto y un núcleo rocoso.

La atmósfera se compone principalmente de hidrógeno y helio junto con vestigios de hidrocarburos y, posiblemente, nitrógeno.

En el manto encontramos distintos tipos de hielos: agua, amoníaco y metano. Los trazos de metano en las regiones exteriores contribuyen a darle al planeta su colorido azul. Un pelín más oscuro que el de Urano.

Como ya se ha comentado en la entrada anterior, es probable que Neptuno haya experimentado un proceso de migración planetaria tras su formación que, probablemente, se produjo a una distancia menor que la que lo separa en la actualidad del sol.

El planeta Neptuno fue el primero en ser descubierto gracias a las matemáticas. Después de numerosos y laboriosos cálculos "a mano" (no existían los ordenadores en esa época) tanto John Couch Adams y Urbain Leverrier emplearon nada menos que ¡cinco años! para terminar los cálculos. Todo ello condujo a que el 23 de septiembre de 1.846 el astrónomo alemán Johann Gottfried descubriera el octavo planeta del sistema solar.

El planeta se ha observado con el telescopio Hubble y con el James Webb si bien la información más sustanciosa que se conoce sobre el mismo se la debemos a la nave espacial "Voyager 2" que el 25 de agosto de 1989 realizó su sobrevuelo más cercano al planeta.

Desde entonces ninguna otra nave espacial ha visitado Neptuno.


Era obligada la visita a la fuente de Neptuno

Os dejo, como siempre, el enlace a la música que he seleccionado para esta entrada del blog.

Ya véis, amigos. Parece que, de momento, y por unos cuantos años, Neptuno permanecerá inexplorado.

¡Hasta el próximo jueves!


Comentarios

  1. Me ha gustado la frase de zoológico celestial.
    Presentas datos informativos muy curiosos.
    Las sondas hicieron un gran papel para su descubrimiento.
    Sabiduría matemática para descubrir el planeta Neptuno, somo muy inteligentes.
    Me suena esa fuente en el parque grande, detalle de adoración a ese planeta en medio de la floresta.
    Las distancias y la inmensidad no deja de sorprenderme.
    Un saludo.

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  2. Ya veo, ya veo que aprecias el uso de metáforas en los escritos. Es verdad que cualquier área de conocimiento en la que te sumerges enseguida te atrapa a nada que tengas un poco de interés.
    Muchas gracias por tu comentario.
    Un abrazo

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  3. Genial la predicción teórica de un nuevo planeta, Neptuno, en el siglo XIX, y genial también toda la información que nos han proporcionado la sonda Voyager II y los telescopios Hubble y Web sobre este planeta. Resaltar de nuevo que las distancias a estos planetas más alejados y no digamos las interestelares es algo que a nuestra mente le cuesta asimilar.
    Un saludo!!

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    Respuestas
    1. Efectivamente; uno de mis retos en este periplo estelar es adquirir la habilidad de apreciar en su justa medida las enormes escalas de distancia y tiempo que median entre los planetas y sus lunas y nuestra tierra o el sol.
      Ya sabes lo que agradezco tus apreciaciones.
      ¡Un saludo!

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  4. Agua, compuestos orgánicos, hidrocarburos, gravedad... Pareciera que con la suficiente energía fuese posible la instalación de bases habitables. Pero claro, hay otros muchos factores, ya solo pensar en ese viento...
    Un abrazo

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    1. A corto plazo veo que interesa más Marte que Neptuno. Pero bueno, es cuestión de tiempo.
      ¡Un abrazo, Jorge!

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