Los satélites de Saturno. Visita al observatorio de Greenwich


Saturno no es una esfera sólida como la de la Tierra, sino más bien una sopa difusa compuesta de rocas, hielo y fluidos metálicos


Comentaba en anteriores entradas la necesidad de que, un aficionado como yo, se vaya haciendo cargo de temperaturas, masas, distancias y dimensiones básicas de los cuerpos celestes que voy estudiando. Es la única manera de captar en su justa medida la inconmensurabilidad del universo.

Me faltaba un parámetro que -cada vez con más claridad- me parece determinante: la gravedad.

Tomando como referencia nuestro planeta es relativamente fácil entender cómo el centro del mismo "tira" hacia él de todo lo que hay en la superficie. Pero la situación se complica cuando varios cuerpos ejercen su influencia gravitatoria en el espacio.

Esta breve introducción viene a cuento cuando nos acercamos al complejo sistema de lunas que posee Saturno. Las interacciones de las lunas entre ellas, con los anillos y con el propio planeta, constituyen una muestra del sutil equilibrio orbital y gravitatorio. El resultado final es que todos los satelites de Saturno realizan una complicada danza regida por las inexorables reglas de la mecánica celeste. 

Para mi gusto, sólo las mentes privilegiadas (como la de Mar Vaquero) llegan a comprender y plasmar en fórmulas matemáticas esas interacciones gravitatorias y aplicarlas luego en la práctica para dirigir las naves espaciales con precisión y economía de combustible hacia las órbitas deseadas. 

Luego está la diversidad del sistema. Cada satélite de Saturno es un mundo único y diferenciado. Y cada uno de ellos cuenta con una historia; una "biografía" única y peculiar.

Si bien el abordaje de todos estos cuerpos lo realizaré más adelante; no me resisto a avanzar algunas referencias básicas del sistema de lunas del planeta anillado.

Titán, por ejemplo es un mundo increíble, con una atmósfera más densa que la tierra y una hidrosfera basada en el hexano. Encélado posee geíseres de agua; Mimas está formado, aproximadamente, en partes iguales por hielo y roca y Japeto posee un hemisferio más oscuro que el hollín, mientras que el otro es de una gran blancura.

Para mi asombro, he "descubierto" la página de la NASA donde se detallan las 146 lunas descubiertas de este planeta (a fecha 8 de junio de 2023)

Los nombres que se le ha asignado a un gran número de ellas no tienen tampoco desperdicio. A los ya conocidos Titan, Mimas o Encélado, por ejemplo, habría que añadir otros como "Paaliaq", "Tarvos", "Ijiraq" o "Kiviuq" por citar sólo alguno de ellos.

¡Los científicos han tenido que realizar un gran ejercicio de imaginación!

La actividad práctica mensual correspondiente a Saturno ha consistido en una visita al observatorio ubicado en el barrio de Greenwich en Londres.

Os adjunto algunas instantáneas que tomé el día de la visita.


36 libras costaron las dos entradas; la mía y la de mi sobrino




Telescopio construido por Willian Herchel. Siglo XVIII


Diferentes modelos de relojes. Siglo XVIII




Muestra de varias esferas armilares



Mi sobrino Pedro, que vive en Londres ejerció de ilustrado guía durante el recorrido




Fotografía de la reunión para acordar el Meridiano 0 o Meridiano de Greenwich




Lugar de inicio del Meridiano de Greenwich



Vista parcial del observatorio con la Escuela Naval y las torres de Canary Wharf al fondo


Finalizaré con un guiño creativo y de práctica con el inglés.

Aquí os dejo con el  Dr Binocs Show. Uranus. The strangest planet in the solar system  

¡Nos vemos de nuevo el próximo jueves, amigos!

Comentarios

  1. Excelente explicación sobre el movimiento de las lunas por la gravedad.
    Todo este proceso impresiona,... y la cantidad de satélites que rodean a Saturno.
    Veo que afinas al máximo tu afición al mundo estelar con tus visitas a los centros de información, buen reportaje.
    Feliz Año y saludos a tu sobrino Pedro, se parece mucho a su padre.
    Un abrazo de Javier.

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  2. Tengo ya ganas de hincarle el diente a las lunas del sistema solar porque es la parte más desconocida y, para mi gusto, la más sustancial. Hay varias de esas lunas que pudieran albergar vida. Si eso se llega a confirmar, sería una auténtica revolución.
    OK, le daré saludos de tu parte a Pedro. Volveré a verlo en febrero.
    ¡Abrazos!

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  3. Interesante visita al Museo de Greenwich y lógicamente a Londes donde hay mucho que ver aunque tú tienes la suerte de hacerlo con frecuancia.
    Un abrazo.

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  4. Ahí estamos dándole al inglés, José Miguel. Hay mucho que ver en Greenwich y también mucho que entender. Poco a poco todo se irá consiguiendo.
    Como de costumbre, te agradezco tus precisos comentarios.
    Otro abrazo

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  5. Maravillado quedo. Gracias por ofrecernos esta información y hacerla tan accesible. Desde luego algunas de esas lunas parecen muy prometedoras: esos géiseres parecen fascinantes.

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  6. Sabes de sobra, Jorge que cuanto más te introduces en un determinado ámbito de la ciencia más y más preguntas e interrogantes surgen y más y más fascinación produce todo ello.
    Vienen tiempos muy, pero que muy interesantes en este apartado.
    Atención a los planes de colonización de la luna y a las nuevas y revolucionarias próximas misiones de exploración espacial.
    Se agradece -como siempre- tu comentario, Jorge.
    ¡Un abrazo!

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